ANAMARIA
MAYOL
(La
Pampa-Argentina)
EL OTRO
BARRIO MI BARRIO
Vengo de otro país
del otro barrio de mi país
igual al otro
al otro y al otro
del barrio pobre de latinoamérica
toda pobre
mutilada dolida desgarrada
pero siempre de pie
vengo de ver el verde
sentir la entraña del hambre
el verde hambre descalzo
largo
ancestral
de ver los rostros del mar
hechos de sal y sol
barcos esperas naufragios
de sentir en mis vísceras
la negritud en patas
esclavitud e historia
silencios gritos
soy la turista del tercer mundo
la crónica burguesa para narrar la muerte
la exclusión la injusticia
la blanquita latina europea
de un pobre país vecino
que tuvo pretensiones de primer mundo
vengo
con este grito en la garganta
atravesando el sur del continente
este verde dolor
mojado por las lluvias
vengo
del otro barrio de mi país
de los suburbios de un poema
que se duele en la piel
CUÁNTO DE LLUVIA-POESÍA
Vengo de otro país
del otro barrio de mi país
igual al otro
al otro y al otro
del barrio pobre de latinoamérica
toda pobre
mutilada dolida desgarrada
pero siempre de pie
vengo de ver el verde
sentir la entraña del hambre
el verde hambre descalzo
largo
ancestral
de ver los rostros del mar
hechos de sal y sol
barcos esperas naufragios
de sentir en mis vísceras
la negritud en patas
esclavitud e historia
silencios gritos
soy la turista del tercer mundo
la crónica burguesa para narrar la muerte
la exclusión la injusticia
la blanquita latina europea
de un pobre país vecino
que tuvo pretensiones de primer mundo
vengo
con este grito en la garganta
atravesando el sur del continente
este verde dolor
mojado por las lluvias
vengo
del otro barrio de mi país
de los suburbios de un poema
que se duele en la piel
CUÁNTO DE LLUVIA-POESÍA
a los que nunca se irán
Cuánto de ti
de mí
cuánto de todos los que llueven
de la lluvia que moja el mar
cuánto de mar en mi oleaje
de oleaje en el mar
de la memoria
cuánto
de memoria en la sombra
cuánto de sombra
húmeda en la tristeza
cuánto de tristeza en la palabra
cuánto en la palabra
para decir poesía
cuánto de poesía sobre los silencios
cuánto de todos los que siguen estando
cuánto
cuánto de lluvia
de mar
de oleaje
de memoria en la voz
EL LAGO
A la memoria
Yo sé que desde el agua
hay rostros que me observan
desde el oscuro fondo
profundo vertical
con sus negras paredes
sus voces me rodean
hacia la superficie trepan
retumban en las piedras con el oleaje
El afuera es distinto tan irreal
tan mágico
en su mística diaria con el viento
pero el lago es un foso
donde el crimen se esconde
bajo este mismo sol
es un profundo foso
donde el silencio oculto persiste
persevera
y cuando me sumerjo en sus gélidas aguas
yo se
que desde el fondo
hay rostros que me observan
IDENTIDAD
Vengo de la raíz de un pueblo
que crece desde el sur como hemisferio
lleva las manos
los brazos de la tierra
fructificados en árbol con el silencio
Vengo desde la extensa noche
con perfume a hierba
iluminada por una luna llena
que en la llanura brilla
y en los cerros
dibuja los colores de mi pueblo
Vengo de la pluralidad
que tiñe la alegría
del fondo de la historia y la memoria
de la árida meseta
de la pampa llanura horizonte
de los Andes que escalan
la combativa espalda
de América Latina
PLAZA DE MAYO
Una vuelta más
giran los pies
las madres los pañuelos
la plaza
urgencia de saberlos vivos
el lugar
dónde apoyar el grito
levantar el dolor como bandera
una vuelta más
los pies
de cada una y de todas
saben
cada imperfección
mosaico
cada paloma nueva
cada ausente
una vuelta más
la plaza
el sitio
de cada una y de todas
dónde llegar
con el coraje intacto
hallar las respuestas
acallar el bullicio de la sangre
por cada hora
de cada una y de todas
con el silencio a cuestas
cada puerta
de cada una y de todas
amordazada
cada lágrima
de cada una y de todas
reseca en la piel
una vuelta más
giran los pies
esperan una respuesta
una vuelta más
la plaza
trinchera
de cada una y de todas
la plaza
la urgencia
la certeza de saber
que no es posible el olvido
Ana María querida, gracias por golpear con tu palabra la puerta del olvido tan fehacientemente..."Yo sé que desde el agua
ResponderEliminarhay rostros que me observan"...o ese girar en la Plaza de Mayo, que es el eterno molino clamando justicia, tan bien logrado en tu palabra.
Mi afecto, admiración y un abrazo solidario.
Anita querida, gracias por acordarte, muy lindo todo. Un gran abrazo
ResponderEliminarY no soy Julian Ferro, soy Daniel Colombato. Abrazo
ResponderEliminarEn cada verso hay, en efecto, una huella de nuestra tierra... ese grito de un pueblo, la mirada del poeta que no es y no puede ser ajeno a su realidad! Encantada con tus versos Anamaria!
ResponderEliminarBellas palabras Ana María. Poemas musicales , como vos. Un abrazo fuerte!
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